Fiebre del mes: Andrés Carvajal

1. ¿Cómo te metiste en el mundo de Land Rover?

R>  Fue en el año 2006. Empezó con la fiebre por las motos viejas, específicamente las Vespas. Mi tata tenía una amistad que tenía un Land Rover Serie 2 y yo necesitaba alguien para ir a traerme una Vespa que había encontrado en Desamparados. El amigo de mi tata se ofreció y ahí empezó todo.. Cuando me monté a ese carro y vi el tablero, los relojes y el sonido dije yo quiero un carro de esos. A partir de ahí seguimos asistiendo a los eventos del Team Land Rover Costa Rica. Adjunto fotos del 2010.

2. ¿Porque escogiste el modelo de Land Rover que tenés?

R> Básicamente es el mismo modelo del Land Rover que tenía el amigo de mi tata, siempre me gusto que el tablero fuera de aluminio y muy básico. Cuando encontré el mío se lo compré a un amigo que tenía años de tenerlo y era una buena oportunidad.

3. ¿Qué le has hecho a tu carro últimamente?

R> El carro se restauró por completo, se le cambio el color, techo, suspension, chasis, pintura, motor, caja, llantas, aros ( adjunto foto del antes y el después)

4. ¿Qué más te gustaría hacerle al carro?

R> Me gustaría ponerle más accesorios, canasta de techo, halógenos, un bulbar, suspensión, plancha protectora y porta repuesto.

5. ¿Cuál es el ride más chuzo que has hecho en tu Land Rover?

El viaje más chuzo y largo fue salir de Heredia con rumbo al volcán Rincón de la Vieja, ir al parque nacional y a la vuelta devolvernos por San Carlos La Fortuna y de nuevo a Heredia, como 700 kilómetros en total. (adjunto fotos del paseo)

6. ¿Qué te hace sentir tu Land Rover?

R>Definitivamente no cambiaría este carro por ningún otro. El sonido, el que dueños de otros LR te saluden en la calle, el que pregunten siempre características del carro me hace sentir orgulloso escuchar comentarios. Ese carro si es de verdad no como los de antes, la sensación de manejo la disfruto mucho y siempre me pone contento salir camino al trabajo y manejarlo. O ir a un paseo y saber que al día siguiente uso el mismo carro para ir a trabajar no tiene precio, es una felicidad total.